En una decisión que marca un giro radical en la política militar estadounidense, el secretario de Guerra, Pete Hegseth, anunció nuevas directivas desde el Pentágono para restaurar lo que denomina “el más alto estándar masculino” dentro del Ejército.
Durante una reunión con altos mandos en la base de Quantico, Virginia (EEUU), Hegseth declaró que se eliminarán en el Pentágono las barbas, el cabello largo y cualquier expresión individual considerada superficial.
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Esta medida forma parte de una reforma más amplia que busca revertir políticas de diversidad, equidad e inclusión (DEI) implementadas en años recientes.
Las nuevas reglas incluyen exámenes físicos obligatorios dos veces al año para todos los rangos, desde soldados rasos hasta generales.
Hegseth criticó duramente la presencia de “generales gordos en los pasillos del Pentágono”. Afirmó que la imagen física de los militares debe reflejar disciplina y fuerza.
También insistió en que las mujeres en unidades de combate deberán cumplir con los mismos estándares físicos que los hombres, subrayando que «no se trata de impedir su participación, sino de exigir neutralidad en los requisitos físicos«.
🇺🇸⚡ Pete Hegseth, Secretario de Guerra:
“Es inaceptable ver generales y almirantes gordos en el Pentágono.
Deben cumplir con los estándares de altura y peso, y aprobar su prueba física.
No más barbas ni pelo largo.”
📌 Mensaje directo al alto mando: disciplina militar por… pic.twitter.com/F6kLvODRnN
— BELLUMARTIS (@bellumartis) September 30, 2025
PALABRAS CONTUNDENTES
«Hoy, bajo mi dirección, cada servicio se asegurará de que todos los requisitos para cada combatiente (…) se ajusten exclusivamente al más alto estándar masculino. (…) La era del liderazgo políticamente correcto y excesivamente sensible termina ahora mismo», dijo Hegseth ante cientos de comandantes llegados desde todas partes del país.
«No quiero que mi hijo sirva junto a tropas que no están en forma ni en unidades de combate, con mujeres que no pueden cumplir con los mismos estándares físicos de combate que los hombres», insistió el líder de la cartera, rebautizada como Departamento de Guerra.
Y enfatizó que no le gusta la existencia de «soldados gordos» en las formaciones. Insistió en que es «completamente inaceptable» y «da mala imagen» ver a «generales y almirantes gordos».
También sugirió nuevos cambios en el liderazgo. Advirtió, que «durante demasiado tiempo, se ha ascendido a demasiados líderes uniformados por razones equivocadas: por su raza, por cuotas de género y por supuestos logros históricos».
«No más cambio climático. No más división, distracción ni delirios de género, no más basura. Como he dicho antes y lo diré de nuevo, hemos terminado con esa mierda», señaló.
