Un día de descanso familiar en los Cayos de Florida (EEUU) se convirtió en una pesadilla este lunes, 1 de septiembre, cuando un niño de ocho años fue atacado por un tiburón mientras practicaba snorkel en el arrecife Horseshoe Reef, cerca de Key Largo.
De acuerdo con la información reseñada por CBS News, el menor, que se encontraba acompañado por su padre y hermano, sufrió una mordedura grave por encima de la rodilla, lo que provocó una hemorragia significativa y su traslado urgente en helicóptero al Hospital Jackson Memorial de Miami.
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El ataque ocurrió alrededor de las 3:30 p.m., según reportes oficiales del Condado de Monroe. De inmediato, testigos alertaron a los servicios de emergencia, y una embarcación de buceo cercana respondió, aplicando dos torniquetes y un vendaje para detener el sangrado antes de guiar a la familia de regreso a tierra firme.
Lo que se detalló, es que el niño llegó en condición crítica, pálido y con pérdida considerable de sangre, lo que obligó a una intervención quirúrgica inmediata en el Centro de Trauma Ryder del Hospital Jackson Memorial.
Las autoridades locales, incluyendo la Guardia Costera y la Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida, activaron protocolos de emergencia y confirmaron que se está llevando a cabo una investigación sobre el incidente.
¿CÓMO EVOLUCIONA EL NIÑO?
Aunque no se han revelado más detalles sobre la evolución del menor, el sheriff Rick Ramsay indicó a El Nuevo Herald que su estado sigue siendo grave.
El caso ha generado preocupación entre residentes y turistas, especialmente por el aumento de visitantes en aguas abiertas durante la temporada alta.
ATAQUES DE TIBURÓN EN FLORIDA
Florida es conocida por concentrar la mayoría de los ataques de tiburón en Estados Unidos. Un estudio reciente reveló que nueve de las 10 playas con más incidentes se encuentran en este estado, encabezadas por New Smyrna Beach, apodada la “capital mundial de las mordeduras de tiburón” con 277 ataques registrados.
“Muchas personas desconocen el peligro que existe en algunas playas de Florida”, advirtió Ryan Blundell, fundador de Tideschart.
Aclaró que estos datos no tendrían por qué asustar a los visitantes, aunque recalcó lo importante que es conocer el estado del mar y respetar las reglas de seguridad.
“Comprender los patrones y comportamientos de los tiburones puede ayudar a los bañistas a tomar decisiones más seguras sobre dónde y cuándo entrar al agua”, añadió Blundell.
