Las intensas lluvias que azotan el oeste de Washington (EEUU) desde principios de semana han generado un aumento sin precedentes en los niveles de los ríos, obligando a las autoridades a ordenar evacuaciones masivas en distintas localidades.
Según el Servicio Nacional de Predicción del Agua (NWPS, por sus siglas en inglés), al menos 18 puntos fluviales se encuentran en niveles de inundación grave, cifra que aumentó respecto a los días anteriores.
LEA TAMBIÉN: ¿HARÁ FRÍO EN EL SUR DE FLORIDA? ESTO SE SABE SOBRE LA POSIBLE LLEGADA DEL VÓRTICE POLAR
Este fenómeno, ha sido descrito por expertos, como uno de los más significativos en la historia reciente de la región.
En consecuencia, las comunidades más afectadas han tenido que trasladar a cientos de familias hacia zonas más altas, mientras equipos de emergencia trabajan en rescates y la habilitación de refugios temporales.
La situación es tan caótica, que las carreteras principales se han visto interrumpidas por el agua y los deslizamientos de tierra, complicando aún más las labores de asistencia. Por ejemplo, en ciudades como Chehalis y Napavine, los bomberos han tenido que intervenir directamente para sacar a residentes atrapados en sus viviendas.
¿QUÉ GENERÓ LAS INUNDACIONES?
El origen de estas inundaciones se vincula con la llegada de un “río atmosférico”, un fenómeno meteorológico que transporta grandes cantidades de humedad desde el Pacífico hacia el noroeste de Estados Unidos.
Este tipo de eventos, cada vez más frecuentes, intensifican las precipitaciones y elevan el riesgo de inundaciones y deslaves.
Es por ello, que los expertos advierten que los niveles de agua podrían mantenerse elevados durante varios días, lo que prolongaría la emergencia.
De hecho, la ciudad de Orting, situada entre los ríos Puyallup y Carbon, enfrenta el riesgo de desbordamientos debido al aumento del caudal provocado por un río atmosférico que continúa impactando la región.
FULL ATMOSPHERIC RIVER HITS WASHINGTON: Flood Waters Swamp Homes Near Fall City as Snoqualmie & Skykomish Rivers Surge 🌧️🌊⚠️ pic.twitter.com/PdblFsQGGr
— SEATTLESUBMISSIONS (@SEATTLESUBMISS) December 10, 2025
¿CUÁLES SON LAS CIUDADES MÁS AFECTADAS?
Las oficinas del Servicio Meteorológico Nacional en Washington han emitido alertas que abarcan un amplio rango de ciudades, desde Orting y Tacoma hasta Everett, Bellingham y Yakima.
La advertencia también incluye a comunidades como Centralia, Port Angeles, Ellensburg y Wenatchee, donde las autoridades locales se mantienen en máxima vigilancia.
El llamado oficial es claro: la población debe permanecer atenta a los reportes y preparada para evacuar en caso de que las condiciones climáticas se intensifiquen.
NIVELES PELIGROSOS E HISTÓRICOS
Para tener una idea de la gravedad del asunto, el río Skykomish, medido en Gold Bar, alcanzó este miércoles los 6,68 metros (21,92 pies). Entró, de hecho, en fase de inundación grave. El récord histórico sigue siendo de 7,47 metros (24,5 pies), marcado en 2006.
Según el NWPS, el caudal podría llegar a 7,38 metros (24,2 pies) en la madrugada de este jueves, muy cerca del máximo histórico, aunque sin superarlo.
El río Skagit también preocupa: el organismo anticipa inundación grave en dos de sus medidores. En el de Concrete, el nivel ya estaba en fase leve, pero se espera un aumento drástico hasta 14,4 metros (47,24 pies), lo que superaría el récord de 12,9 metros (42,32 pies) establecido en 2003.
A las 14:20 (hora del Este) de este miércoles, el nivel del agua era de 8,64 metros (28,34 pies).
ANTECEDENTES
Según KING 5, en 2010 un río atmosférico descargó entre seis y 13 pulgadas de lluvia en 48 horas sobre el Puget Sound. El impacto fue severo: unas 230 viviendas cercanas al río Stillaguamish recibieron recomendaciones de evacuación voluntaria, mientras que deslizamientos de tierra bloquearon carreteras en varios condados y dejaron fuera de servicio la línea Cascades de Amtrak durante dos días.
Aunque los meteorólogos insisten en que el fenómeno de esta semana es diferente, la persistencia de las lluvias y magnitud del sistema podrían llevar nuevamente a varios ríos a niveles de inundación, incrementando los riesgos para residentes y negocios locales.

